
Tomoe tiene pesadillas todas las noches en las que se retuerce de placer en la sala de orientación, siendo penetrada por un estudiante, posando con una expresión de éxtasis y haciendo la señal de la paz con ambas manos mientras es fotografiada. Hoy, mientras desprecia a un estudiante que la mira con lujuria, aparece en escena el mismo tipo que ve en sus sueños, Nemoto. Aunque Tomoe muestra su desprecio hacia Nemoto cuando él la llama a la sala audiovisual, no puede contener su excitación frente a su miembro y se arrodilla lentamente…